Información sobre Cáncer del Hígado

Se pueden formar varios tipos de cáncer en el hígado. El tipo más común de cáncer de hígado es el carcinoma hepatocelular, que comienza en el tipo principal de célula hepática (hepatocito). Otros tipos de cáncer de hígado, como el colangiocarcinoma intrahepático y el hepatoblastoma, son mucho menos comunes.

No todos los cánceres que afectan el hígado se consideran cáncer de hígado. El cáncer que comienza en otra área del cuerpo, como el colon, el pulmón o el seno, y luego se propaga al hígado se llama cáncer metastásico en lugar de cáncer de hígado. Y este tipo de cáncer lleva el nombre del órgano en el que comenzó, como el cáncer de colon metastásico para describir el cáncer que comienza en el colon y se disemina al hígado. El cáncer que se propaga al hígado es más común que el cáncer que comienza en las células hepáticas.

El carcinoma hepatocelular (CHC) es el tipo más común de cáncer primario de hígado. El carcinoma hepatocelular ocurre con mayor frecuencia en personas con enfermedades crónicas del hígado, como la cirrosis causada por hepatitis B o infección por hepatitis C.

Las pruebas y procedimientos utilizados para diagnosticar el cáncer de hígado incluyen:

• Análisis de sangre. Los análisis de sangre pueden revelar anomalías en la función hepática.
• Pruebas de imagen. Su médico puede recomendar pruebas de imagen, como ecografía, tomografía computarizada (TC) e imágenes de resonancia magnética (IRM).
• Extracción de una muestra de tejido hepático para su análisis. Su médico puede recomendar extraer una porción de tejido hepático para realizar pruebas de laboratorio con el fin de hacer un diagnóstico definitivo de cáncer de hígado. Durante una biopsia de hígado, su médico inserta una aguja delgada a través de su piel y dentro de su hígado para obtener una muestra de tejido. En el laboratorio, los médicos examinan el tejido bajo un microscopio para buscar células cancerosas. La biopsia de hígado conlleva un riesgo de sangrado, hematomas e infección.

Una vez que se diagnostica el cáncer de hígado, su médico trabajará para determinar la extensión (etapa) del cáncer. Las pruebas de estadificación ayudan a determinar el tamaño y la ubicación del cáncer y si se ha diseminado. Las pruebas de imagen utilizadas para clasificar el cáncer de hígado incluyen tomografías computarizadas, resonancias magnéticas y tomografías óseas. Existen diferentes métodos de estadificación del cáncer de hígado. Un método utiliza los números romanos I a IV, y otro usa las letras A a D. Su médico usa la etapa de su cáncer para determinar sus opciones de tratamiento y su pronóstico. El estadio IV y el estadio D indican el cáncer de hígado más avanzado con el peor pronóstico.

La mayoría de las personas no tienen signos y síntomas en las primeras etapas del cáncer primario de hígado. Cuando aparecen signos y síntomas, estos pueden incluir:

• Perder peso sin intentarlo.
• Pérdida de apetito
• Dolor abdominal superior
• Náuseas y vómitos
• Debilidad general y fatiga.
• Hinchazón abdominal
• Decoloración amarilla de la piel y el blanco de los ojos (ictericia).
• Heces blancas, calcáreas

Haga una cita con su médico si experimenta cualquier signo o síntoma que le preocupe.

Los tratamientos para el cáncer primario de hígado dependen de la extensión (etapa) de la enfermedad, así como de su edad, su salud general y sus preferencias personales.

Cirugía: las operaciones utilizadas para tratar el cáncer de hígado incluyen:

• Cirugía para extirpar el tumor. En ciertas situaciones, su médico puede recomendar una operación para extirpar el cáncer de hígado y una pequeña porción del tejido hepático sano que lo rodea si su tumor es pequeño y su función hepática es buena. Si esta es una opción para usted, también depende de la ubicación de su cáncer dentro del hígado, de qué tan bien funciona su hígado y de su salud en general.
  Cirugía de trasplante hepático. Durante la cirugía de trasplante de hígado, su hígado enfermo se extrae y se reemplaza con un hígado sano de un donante. La cirugía de trasplante de hígado es solo una opción para un pequeño porcentaje de personas con cáncer de hígado en etapa temprana.
• Tratamientos localizados: los tratamientos localizados para el cáncer de hígado son aquellos que se administran directamente a las células cancerosas o al área que las rodea. Las opciones de tratamiento localizado para el cáncer de hígado incluyen:
  Calentando las células cancerosas. En un procedimiento llamado ablación por radiofrecuencia, la corriente eléctrica se usa para calentar y destruir las células cancerosas. Utilizando una ecografía o una tomografía computarizada como guía, su cirujano inserta una o más agujas finas en pequeñas incisiones en su abdomen. Cuando las agujas alcanzan el tumor, se calientan con una corriente eléctrica, destruyendo las células cancerosas.
• Congelar células cancerígenas. La crioablación utiliza el frío extremo para destruir las células cancerosas. Durante el procedimiento, su médico coloca un instrumento (cryoprobe) que contiene nitrógeno líquido directamente sobre los tumores del hígado. Las imágenes de ultrasonido se utilizan para guiar la criosonda y controlar la congelación de las células.
• Inyectar alcohol en el tumor. Durante la inyección de alcohol, el alcohol puro se inyecta directamente en los tumores, ya sea a través de la piel o durante una operación. El alcohol hace que las células tumorales mueran.
• Inyectar medicamentos de quimioterapia en el hígado. La quimioembolización es un tipo de tratamiento de quimioterapia que suministra medicamentos fuertes contra el cáncer directamente al hígado.
• Colocación de bolas llenas de radiación en el hígado. Las esferas diminutas que contienen radiación pueden colocarse directamente en el hígado, donde pueden administrar radiación directamente al tumor.

Radioterapia: este tratamiento utiliza energía de alta potencia de fuentes como los rayos X y los protones para destruir las células cancerosas y reducir los tumores. Los médicos dirigen cuidadosamente la energía hacia el hígado, a la vez que preservan el tejido sano circundante. Durante el tratamiento de radioterapia con haz externo, usted se acuesta en una mesa y una máquina dirige los haces de energía en un punto preciso de su cuerpo. Un tipo especializado de radioterapia, llamada radiocirugía estereotáctica, consiste en enfocar muchos rayos de radiación simultáneamente en un punto de su cuerpo.

Cuidados paliativos: los cuidados paliativos son cuidados médicos especializados que se enfocan en brindar alivio del dolor y otros síntomas de una enfermedad grave. Los especialistas en cuidados paliativos trabajan con usted, su familia y sus otros médicos para proporcionar una capa adicional de apoyo que complementa su atención continua. Los cuidados paliativos pueden usarse mientras se realiza otros tratamientos agresivos, como cirugía, quimioterapia o radioterapia. Cuando los cuidados paliativos se usan junto con todos los otros tratamientos apropiados, las personas con cáncer pueden sentirse mejor y vivir más tiempo. Nuestro equipo de médicos, enfermeras y profesionales especialmente capacitados brindan cuidados paliativos para mejorar la calidad de vida de las personas con cáncer y sus familias. Esta forma de atención se ofrece junto con tratamientos curativos u otros tratamientos que pueda estar recibiendo. Obtenga más información sobre los cuidados paliativos de San Cristóbal.

San Cristóbal Cancer Institute ofrece una amplia gama de opciones para ayudar a nuestros pacientes a sentirse tranquilos y apoyados durante el proceso de detección, diagnóstico y tratamiento, así como a volver a la vida después del cáncer. Explora diferentes alternativas, incluyendo ayuda financiera para aquellos elegibles, en nuestra sección de Recursos para Pacientes.